“A veces la palabra solo representa una manera, más hábil que el silencio de callar”

Jean Paul Sartre





martes, 26 de mayo de 2009

WERE YOU BORN TO RESIST OR BE ABUSED?



Best Of You

I've got another confession to make
I'm your fool
Everyone's got their chains to break
Holdin' you

Were you born to resist or be abused?
Is someone getting the best, the best, the best, the best of you?
Is someone getting the best, the best, the best, the best of you?

Are you gone and onto someone new?
I needed somewhere to hang my head
Without your noose
You gave me something that I didn't have
But had no use
I was too weak to give in
Too strong to lose
My heart is under arrest again
But I break loose
My head is giving me life or death
But I can't choose
I swear I'll never give in
I refuse

Is someone getting the best, the best, the best, the best of you?
Is someone getting the best, the best, the best, the best of you?
Has someone taken your faith?
Its real, the pain you feel
You trust, you must
Confess
Is someone getting the best, the best, the best, the best of you?
Oh...

Oh...Oh...Oh...Oh...

Has someone taken your faith?
Its real, the pain you feel
The life, the love
You die to heal
The hope that starts
The broken hearts
You trust, you must
Confess

Is someone getting the best, the best, the best, the best of you?
Is someone getting the best, the best, the best, the best of you?

I've got another confession my friend
I'm no fool
I'm getting tired of starting again
Somewhere new

Were you born to resist or be abused?
I swear I'll never give in
I refuse

Is someone getting the best, the best, the best, the best of you?
Is someone getting the best, the best, the best, the best of you?
Has someone taken your faith?
Its real, the pain you feel
You trust, you must
Confess
Is someone getting the best, the best, the best, the best of you?
Oh...


Su talento era tan natural como el dibujo que forma el polvillo en un ala de mariposa. Hubo un tiempo en que él no se entendía a sí mismo como no se entiende la mariposa, y no se daba cuenta cuando su talento estaba magullado o estropeado. Más tarde tomó conciencia de sus vulneradas alas y de cómo estaban hechas, y aprendió a pensar pero no supo volar, porque había perdido el amor al vuelo y no sabía hacer más que recordar los tiempos en que volaba sin esfuerzo.

París era una fiesta. Ernest Hemingway.



martes, 19 de mayo de 2009

EL TIEMPO TODO LO CURA O ES TODO LOCURA

Un hombre, una mujer,  enlazados por la inercia de sus soledades que nunca se fundieron que terminaron diluyéndolos, destruyéndolos, entre miedos subyacentes y mentiras paliativas.
Quedó signada la suerte en la desgracia de dos almas que confrontaron y afrontaron la experiencia de un amor desconsolado......


El tiempo todo lo cura o es todo locura, si continuo extendiendo los plazos del sufrimiento, del auto compadecimiento, prorrogando los términos del empecinamiento en el lamento.Comprendo que no existe proporcionalidad entre causas y efectos, entre excesos y defectos. Vivo atribulada por emociones contradictorias y sensaciones totalitarias, que perpetuán la tortura de esta cordura que expira, atrapada entre razones sin salida.
El amor nació entre los abismos de nuestras diferencias, que tuvimos la deferencia de obviar para desafiar la mezquindad de lo imposible y convertirla en providencia de lo posible. La traición descorazonadora se transubstanció en una palabra, que fue condición, oposición total del amor. El silencio elocuente de mi mirada fue el epilogo de nuestra historia de dolor, que vio caer a sus pies al amor herido de muerte. Murió el amor entregado a su destino, cobarde sin oponer resistencia, digno sin implorar piedad.
Los fantasmas pueblan mi memoria y gobiernan espectralmente el presente, reclaman su soberanía sobre mi vida, adquieren entidad real en la soledad que me asila. Perdida en lo perdido. Nostalgia de mí misma, de la que fui, de la que sé que pude ser, de la que no fui.
Pasé este tiempo transitando la desilusión entre opciones reducidas y elecciones inducidas, asfixiando palabras, aboliendo las leyes de un deseo implacable que me devoraba el alma, reprimiendo el caudal de dolor durante el día, ocultándolo a todos, libertándolo en solitarias lágrimas nocturnas que se ahogaban entre mis escasas dichas.
Mi corazón no puede resistir una desilusión más. No puedo reincidir en el anhelo de la utopía sintética, en la fantasía del amor como sinergia, quiero creer que es posible, pero ya no puedo seguir afrontando los costos de querer lo que quiero. Nunca medí la entrega en términos de resultados, no hice cálculos, no utilice estrategias, no especulé, no me conformé. Se me acabó el crédito, ya no tengo resto. La regeneración se hace cada vez más lenta, las heridas subsistentes dejan incapacidades consecuentes y daños permanentes. Mi sensibilidad me pone en inferioridad de condiciones y convicciones. Las inconmensurables implicancias de mi accionar en la idealidad y de mi omitir en la realidad, me detienen hoy frente a todo lo perdido, al costado del camino asolado por las tempestades.
Me paso el día tratando de entender, pero siento que no entiendo nada, que siento todo. Todo es demasiado.
Nada justifica este dolor omnipresente, este duelo sin tiempo ni distancia.Nada de suerte para revertir mi suerte

Todo o nada. Sin medios.


Si vieras a la que sin ti duerme en un jardín en ruinas en la memoria. Allí yo, ebria de mil muertes, hablo de mí conmigo sólo por saber si es verdad que estoy debajo de la hierba. No sé los nombres. ¿A quién le dirás que no sabes? Te deseas otra. La otra que eres se desea otra. ¿Qué pasa en la verde alameda? Pasa que no es verde y ni siquiera hay una alameda. Y ahora juegas a ser esclava para ocultar tu corona ¿otorgada por quién?, ¿quién te a ungido?, ¿quién te ha consagrado? El invisible pueblo de la memoria más vieja. Perdida por propio designio, has renunciado a tu reino por las cenizas. Quien te hace doler te recuerda antiguos homenajes. No obstante, lloras funestamente y evocas tu locura y hasta quisieras extraerla de ti como si fuese una piedra, a ella, tu solo privilegio.
EXTRACCIÓN DE LA PIEDRA DE LA LOCURA. ALEJANDRA PIZARNIK

lunes, 4 de mayo de 2009

A BRILLAR MI AMOR

Vamos a brillar mi amor....
Mi nombre es muy mío, porque lo comparto con poca gente. Es poco habitual, raro, original, particular, inusual, especial y podría seguir enumerando adjetivos del estilo que he escuchado decir a la gente sobre mi nombre. Como todo lo mío, mi nombre es complicado, o digamos mejor complejo, para no darle la carga negativa que tiene lo complicado.
He disfrutado y padecido mi nombre en partes iguales, ha generado equívocos y situaciones de todo tipo: es muy delator porque es de difícil olvido, no tengo apodo ni diminutivo, se creen que es mi apellido, que es mi nombre artístico, se lo confunden con un nombre masculino. Lo escribieron mal en mis estampitas de comunión, en el buzo de Bariloche en quinto año,  y en la credencial de la prepaga figuraba como masculino. Nunca pude comprarme carteles con mi nombre, ni collares, ni pulseras, ni calcomanías. Iba por el mundo buscando algo con mi nombre, con la ilusión de encontrarlo y siempre era la misma respuesta: - si querés te lo mandamos a hacer, porque ese nombre no lo tengo.
La originalidad de mi vida tenía que estar a la altura de mi nombre y no defraudé.
Probablemente lo que más me gusta sobre mi nombre es que su elección tiene origen literario. Mi mamá, a poco de enterarse que estaba embarazada, leyendo un cuento de J.D. Salinger, decidió que yo iba a ser mujer y que me iba a llamar como la esposa del personaje principal. Este cuento me resulta insuperable, pero el personaje al que le debo mi nombre es despreciable, superficial e insensible. Por razones que no alcanzo  a comprender, mi mamá, obvió las características negativas del personaje en cuestión y según sus palabras, se enamoró del nombre. Mi suerte quedó sellada. Era el año 79, las ecografías no eran precisas respecto al sexo de los bebes, pero el gobierno militar si lo era con respecto a tener un nombre nacional, cristiano y de género bien definido. Mi mamá, siempre logra lo que se propone y yo no iba a ser una excepción. Naci nena y me llamé como ella había decidido, aunque no fue sencillo..... Estuve un año sin nombre, porque cuando mi papá fue al registro civil, previsiblemente, se negaron a anotarme, aduciendo que mi nombre era extranjero. Mi papá conciliador, intentó convencer a mi mamá para que me pusieran un nombre común, normal o como repetía él, del montón. Mamita, ayudada por la revolución hormonal post parto, se empecinó. Naturalmente, mi padre, no tuvo el coraje de enfrentar semejante convicción, por lo que tuvo que pedir autorización judicial, y presentar ante el registro un antecedente de una chica con mi nombre en un pueblo cercano a mi ciudad. Finalmente, deje de ser NN, para pasar a ser:  la chica de nombre raro.

Mi amigo, que va a ser padre, después de un arrebato etílico sentimental, desistió de su intención de nombrar a su hija como yo, porque según dijo su mujer (que nunca va a ser mi amiga), es muy de cabaretera francesa del Moulin Rouge (al menos cobraría en Euros). Para elegir mejor, se compró un libro de nombres y sus significados. Lo primero que hacemos es buscar mi nombre, así, nos enteramos que es de origen irlandés y significa: la que brilla como el mar....Últimamente no estoy brillando mucho que digamos, hubiera preferido algo más oscuro o profundo, pero después de leer lo que significan algunos nombres, creo que zafa bastante. Buscamos los nombres de la gente que conocemos y nos aprestamos a leer las características que supuestamente, les dan los nombres a las personas que los llevan y la verdad que coincidían bastante.
Para mi sorpresa, me vengo a anoticiar que el nombre de mi último amor, uno de los nombres más comunes en la historia de los nombres, DIEGO, en hebreo significa: el suplantador o engañador. Me indigné conmigo misma.
Emboscados por el destino que no ahorra en ironías, el engañador engañó y la boluda que brilla como el mar, le creyó y se dejó engañar…
Pasó lo que tenía que pasar, la traición, el dolor, el rencor, pasó todo menos el amor, que me oscureció con su ausencia. El amor es algo que le pasa a otra gente, a mí, me pasa de largo o como en este caso, me pasa por encima y me aplasta.
Todo, absolutamente todo, me gritaba la realidad, la incompatibilidad, el libro de los nombres, la numerología, horóscopo maya, chino, celta, todo.

No me nombres nunca más...

Sé que no hay protocolo para manejarse con los ex, pero desearía que lo hubiera. Como yo sabía que íbamos a seguir indirectamente relacionados por temas laborales, me llamé a silencio. No hice quibombo, no protesté, no reclamé explicaciones. No llamé con excusas estúpidas, borré los números del celular para evitar impulsos melancólico- etílicos que comprometieran mi dignidad. Me guardé las preguntas, me tragué los reproches, con un esfuerzo inmenso y a costa de mi salud.
Creo que hasta abrí el blog, para sacar de adentro mío, todo lo que no podía decirle y tenía atragantado. ¿Por que él, no puede hacer lo mismo?
La última vez que nos encontramos, en una reunión, estaba rodeada de 8 tipos que no sabían nada de lo nuestro y tuve que remarla terriblemente. Yo escuchaba como pronunciaba mi nombre excesivamente, provocativamente y lo quería matar. Hablaba de mis méritos laborales y eran puñales que se clavaban en mi alma, me violentaba, me desquiciaba. Tener que firmar papeles, ver su nombre al lado del mío...
Perdida definitivamente en el camino que los sueños prometieron a mis ansías, estoy frágil, sensible, extremadamente susceptible, vacía ya de amar y de llorar tanta traición. Quizá por eso me afectan tanto cosas que no deberían tener relevancia.
Los últimos meses, trabajé y trabajé, los fines de semana, resignando mis vacaciones para liquidar y derivar todos los casos que teníamos en común. Mi intención era que desapareciera de mi bandeja de entrada al mismo tiempo que de mi corazón.
De su parte solo hubo piedras en el camino, demoras inexplicables y provocaciones de toda índole, usando el trabajo como pretexto, cobardemente y certeramente, porque sabe que me afecta.
Me manda cadenas de mail pedorras, con títulos como: léelo con bronca o me rompió el corazón. Yo no quiero explicaciones, ya no, ni que me tenga consideración, ni que me pida disculpas, solo quiero que me deje en paz, entendida en este particular, como la ausencia de su presencia física y virtual.
Quiero que sea feliz, lejos de mí, pero lejos a veces no es suficiente. No quiero que me mande mensajes por intermedio de otra gente, no quiero saber si está mal, no quiero que escriba mi nombre, que pronuncie mi nombre, que abuse de su uso, ¿es mucho pedir?.



Las observaciones y vivencias del solitario taciturno son a la vez más borrosas y penetrantes que las del hombre sociable, y sus pensamientos, mas graves, extraños y nunca exentos de cierto halo de tristeza. Ciertas imágenes e impresiones de las que sería fácil desprenderse con una mirada, una sonrisa o un intercambio de opiniones, le preocupan más de lo debido, adquieren profundidad e importancia en su silencio y devienen vivencia, aventura, sentimiento. La soledad hace madurar lo original, lo audaz e inquietantemente bello, el poema. Pero también engendra lo erróneo, desproporcionado, absurdo e ilícito.

Muerte en Venecia. Thomas Mann.