“A veces la palabra solo representa una manera, más hábil que el silencio de callar”

Jean Paul Sartre





domingo, 18 de enero de 2009

PRINCIPIO DE INCERTIDUMBRE

¿Saturday Night Fever?
Ayer fue una noche de Sábado, tormentosa, y fue la lluvia la inmejorable banda sonora para mi letanía de amores perdidos y encontrados y vueltos a perder. Post cena con amigos, escribí lo siguiente:
Hoy no me emborrache para olvidar, no, podría haberlo hecho, estaba en todo mi derecho como portadora de un corazón malherido. Pero no lo hice,  más que nada por temor, pavor a que los limites que resguardan mi honor se vean traspasados;  y te llame y te diga toda las cosas que te diría y  que prefiero callar, para salvar lo poco de orgullo que permanece en mí,  cuando todo lo que sentía perece. No merece la pena que me exponga frente a vos. En lugar de alcohol, usé a modo de quitapenas, una torta de dulce de leche y chocolate, a la que le dí uso terapéutico.
Recibí comentarios de todo tipo de mis amigos: que estas muy flaca, que tenes los ojos vidriosos, que estas demacrada, y callada. Este tipo de comentarios fueron provenientes mayormente de la parcialidad femenina. Presumo que a modo de consuelo los hombres se inclinaban por destacar o rescatar mi cogibilidad: que estas buena, que te daría, ect.

No dudo de sus buenas intenciones y me resulta extraño, verme a mí en la posición de "la consolada", de la débil, de la que tiene que ser cuidada y no de la que cuida, que es, en general ,el rol que ocupo en el grupo de mis amigos. Esta para nada humilde servidora, con su filosofía barata y diletante en psicología, suele ser  la que se ocupa de dar consejos pedorros, trillados e innecesarios, tipo libro de auto ayuda en liquidación. Hoy, estoy por primera vez del otro lado y me entrego a las sentencias y a las recomendaciones de mis amigos, a saber algunas del estilo:
- El problema es que vos te entregaste a full, no mediste, que sos muuuuy buena ( es decir, un eufemismo para no decirme sos muy pelotuda )
-
En defensa propia: siempre dije que no tengo medio, que no concibo ir a menos, no me sale.Mi naturaleza temerosa, duda y duda, pero cuando me llega la certeza al corazón, me entrego con todo, doy todo sin medida, sin hacer cálculos, sin fines de lucro.Supongo, que ellos se preocuparon porque siempre me habían visto en mi faceta de chica sensata, racional y controlada, y lo que me paso rompió mis esquemas. No es que cambie con él, es que sacó a relucir una faceta mía desconocida, tanto para ellos como para mí misma.
- Que para todos era muy obvio que me mentía, que yo creí demasiado en él, acá sin eufemismos me dicen: fuiste muy boluda, nena.
-
En condena propia: reconozco que vi y creí lo que quise creer para que funcionara, que recién hoy puedo ver lo boluda que fui. Y sin embargo….
- Tanto tiempo que me tomé y tan selectiva que fui siempre, y no sirvió para nada, que tengo que aprender de los errores. Que no puedo rechazar con cualquier pretexto los candidatos que aparecen y después perder la cabeza por uno que aparece de la nada.
- En defensa propia: Que parte no entienden?…. perdí el corazón y después la cabeza, que la elección no es 100 % racional, que creer en alguien, es de alguna manera un acto de fe, de confiar más allá de la razón, que la elección nos excede.
- Que cuando estaba con él ,yo era otra persona.
-
En condena propia: SI!!! era una persona enamorada, boludamente enamorada. Descendió mi desempeño laboral, aumentó cierta conducta errática, perdí las llaves de la oficina dos veces, e hice abandono temporario de los lugares que solía frecuentar, lo admito.
- Que mejor me busco un chongo, que el amor no existe, que me voltee a todo muñeco que se me cruce por el camino, que me voy a relajar, que un clavo saca otro clavo, que no me endurezca porque después nadie me va a querer clavar ……metáforas masculinas del macho argentino,  y por supuesto ofreciéndome una lista de voluntarios para hacerme olvidar de él con otro cuerpo.
- En condena propia: Cuando van a entender que lo que no puedo olvidar no es solamente su cuerpo…. es ese el detalle que omiten, que estar enamorada significa exagerar desmesuradamente la diferencia entre un hombre y otro. No me da lo mismo cualquier cuerpo consuelo.


Así estoy hoy, año nuevo, amor viejo….continúo enredando sombras, pero intuyo la luz, más allá de las limitaciones de mi mirada, de las heridas cicatrizadas y vueltas a abrir. Creo en los mundos posibles e imposibles,  en la potencia de este mundo actual. Me aferro a la posibilidad pura, bruta e infinita que contiene la vida en general. Comprendo que la vida está compuesta de muertes diarias y de nacimientos que le siguen, inevitable, necesaria y afortunadamente.




EL AMOR EN SU DESDICHA
DEJA QUE TU AMOR SE VAYA

Deja que tu amor se vaya
Deja que tu amor se vaya, si así lo quiere.
No trates, oh loco, de impedir su caprichoso vuelo.
De cuanto dio y se lleva
Lo mejor en ti ya permanece.

Lo mejor permanece; en vano
Daría dicha o recibiérala
O nos la arrebatara hasta herirnos,
Si aún con todo deja
El ánimo constante
De afrontar noblemente la fortuna, y soportar
La suerte con buen temple, y aún ser puros,
Y aún eminentes en la más alta causa,
y aún ser dignos del amor que fue.
El amor, cuando llega, en verdad omnipotente
Es, mas no cuando se va. Déjala ir. Que la semilla
brota en el propicio instante, y crece
fortalecida por el estío; y cuando éste muere,
ella es ya, y permanece, árbol perfecto.

Daría dicha o recibiérala
o nos la arrebatara hasta herirnos.
Oh amor, ¿Qué importa?

Pues si algo has dado, amor, ya algo
Es nuestro que nada podrá quitarnos;
y, como aún es rey, el destronado,
así el que ha amado verá al amor en su desdicha.
Robert Louis Stevenson



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